La Edad Media es un período de la historia de Europa que comprende un aproximado de mil años de avance y desarrollo de la cultura, la política y la economía de los países europeos. Se ubica entre el siglo V hasta el siglo XV de nuestra era.
Inicia con la caída del Imperio Romano en el año 476 d.C., conocido como la Edad Antigua, y culmina a finales del 1400 con el Descubrimiento de América y el inicio de la Edad Moderna.
Importantes avances en cuanto a ciencia, tecnología, economía y religión se desarrollaron durante este período. Veamos a continuación sus principales características.
1. Etapas de la Edad Media
Este período de la historia se divide en dos etapas, la Alta Edad Media y la Baja Edad Media. La primera comprende el período transcurrido entre los siglos V a XI d.C. y la segunda entre los siglos XII al XV d.C.
La Alta Edad Media fue un tiempo marcado por la economía feudal, donde los miembros de la clase alta (entiéndase la realeza, la nobleza y el clero) tenían gran influencia política y gozaban de privilegios y beneficios en contraposición con los vasallos o el pueblo.
El feudo eran administrados por los señores feudales, lo que luego se conocería como terratenientes, quienes manejaban la tierra y su producción, pero no la trabajaban.
Los vasallos, eran los pobres, los campesinos que trabajaban la tierra y la cultivaban a cambio de un techo para dormir y la protección de sus señores en caso de guerra.
La Baja Edad Media, por su parte, es un período donde se incrementa el poder del Estado, surgen los primeros sistemas de comercio y el cristianismo se expande rápidamente como única fe gracias a Las Cruzadas.
Durante esta época se realizaron importantes avances en política, cultura y economía, incluso se llegó a gozar de un auge de prosperidad grande.
No obstante, el mal sistema de salubridad pública y la carencia de higiene llevó a la población a sufrir grandes enfermedades y muertes.
2. El Sistema de Productividad Económica: El Feudo
Este sistema consistía en la administración por parte de pocos (generalmente hombres acaudalados y con títulos nobiliarios) de las tierras que eran trabajadas por los pobres y vasallos, generalmente a cambio de poder vivir en los mismos terrenos que cuidaban.
Aunque los trabajadores eran hombres libres, en la práctica seguían bajo una esclavitud disfrazada, pues no eran propietarios del terreno trabajado y tampoco recibían pago alguno por sus servicios, todo se reducía a servir y obedecer a los señores feudales.
La producción de la tierra era entregada a los señores feudales para que estos la distribuyeran e intercambiaran.
Existían diferentes tipos de feudos: el de cámara, que era controlado por un señor que ostentaba el poder; el eclesiástico, que era otorgado por la Iglesia a cualquiera de sus miembros; el laical, que era asignado por príncipes o señores y no era propiedad de la Iglesia; entre otros.
3. La Guerra
La Edad Media fue un tiempo de constantes guerras, pueblos nórdicos, germanos, romanos, musulmanes, queriendo invadir a otros y tomar sus tierras.
Había también durante este período una guerra librada por la Iglesia contra quienes pretendía expandir la religión musulmana.
Los cruzados iban así recorriendo los países y enfrentando a todos los que se oponían a la fe cristiana.
4. El Poder
Quienes ostentaban el poder eran los reyes y la nobleza, así como los guerreros que eran tratados como nobleza y tenían el poder de mandar y decidir qué hacer. El clero era también parte importante del sistema de gobierno.
El poder se centraba en la protección, en el cuidado de las tierras pertenecientes al reino y los pobladores, en la participación en la guerra y en la distribución de la producción o en la construcción de castillos y propiedades.
5. Religión
La religión predominante era la católica, de allí que la Iglesia y el clero pudieran también ostentar poder entre el reino. Asesoraban y aconsejaban a los reyes en las decisiones a tomar y tenían sus propios tribunales de justicia.
Las Cruzadas se libraron principalmente para contrarrestar el influjo de la avanzada musulmana y de otras creencias religiosas.
6. Teocentrismo
Producto de la creencia en un solo Dios y en el respeto y el temor del mismo, la Iglesia católica tenía el poder de intervenir en todos los asuntos, tanto privados como públicos, de la sociedad.
Aparte de que llevaba el registro de los nacimientos, bautismos, matrimonios y fallecimientos.
La Iglesia dirigía el pensamiento y las costumbres, siempre basados en el respeto a Dios, a las sanas costumbres y a la doctrina de la Iglesia.
7. Cisma de Occidente
Dentro de la Iglesia se vivían también ciertas dificultades. El clero, especialmente el de alta jerarquía (como obispos y cardenales) estaba dividido por desacuerdo con algunas formas de manejar las decisiones y políticas eclesiales.
En 1378, tras la muerte del papa Gregorio XI, la Iglesia enfrentó su primera división interna. Al ser elegido Urbano VI como papa, un sector no estuvo de acuerdo y proclamó a Clemente VII como nuevo pontífice. Existían así dos papas en un mismo período.
En la sede papal de Roma se encontraba Urbano VI, mientras que Clemente VII se residenció en el palacio Aviñón en Francia. Esto trajo mayores dificultades, pues los gastos de manutención del papa de Aviñón recaían sobre el deprimido pueblo francés.
Aunque Clemente VII luchó por el crecimiento de la fe en Francia y por ser reconocido como el verdadero papa, tras su fallecimiento, el Concilio de Constanza proclamó que su papado nunca fue canónico y que el verdadero pontífice había sido Urbano VI.
8. Filosofía y Teología
Debido al mismo influjo de la Iglesia católica, la filosofía no produjo grandes avances más allá del plano eclesial.
Toda la gran filosofía, de por sí profunda y llena de sentido, fue dirigida siempre en el plano teológico, intentando hacer ver cómo razón y fe tenían una relación dicotómica en la vida de los hombres.
La filosofía distante de la religión se dedicó simplemente al estudio de las grandes obras como las de Platón y Sócrates.
9. Ciencia y Tecnología
Si bien los avances científicos no fueron muy notorios, se fue abriendo paso al estudio del cuerpo humano y sus órganos internos. Igualmente se realizaron cambios en la forma de recolección de las cosechas y el arado de la tierra con maquinarias para tales fines.
A mediados del siglo XV, propiamente en 1440, Johannes Gutenberg inventa la imprenta, una prensa de planchas movibles que permitía imprimir sobre papel. A partir de allí surgen los primeros libros impresos y se imprime en masas la Biblia por primera vez.
10. Cultura
Durante la Edad Media los avances culturales no fueron tan notorios ni sofisticados, simplemente se dedicaron a preservar las tradiciones culturales grecorromanas ya existentes; el teatro y las diferentes formas de arte eran muy conservadoras.
11. Literatura
La literatura de esta época buscaba reflejar en cierto modo la realidad circundante.
De allí se conocen los cantares de gesta, novelas que plantean la realidad de la guerra y los guerreros a caballo, siempre peleando por un reino, mientras extrañan grandemente a su amada.
Lo resaltante de esta forma literaria es que no era propiamente escrita sino cantada, compuesta con versos en rima que facilitaban su memorización y que al ser cantados iban pasando de persona en persona y siendo modificados en el camino.
12. Música
La música de la Edad Media fue quizás una de las formas culturales más representativas de esta época, pues no estaba únicamente centrada al ámbito eclesial.
De los instrumentos de viento se dio paso al uso de los instrumentos de cuerda, los cuales permitían la incorporación de cantos en las piezas musicales.
En la liturgia religiosa y en las oraciones, el canto fue evolucionando. Se cantaban los salmos y otras oraciones de un modo ceremonial, a su vez se combinaron las formas de canto galicano y romano para dar paso al canto gregoriano.
13. Agricultura
La agricultura y la agronomía eran las principales formas de sustento y de economía que existieron en la Edad Media.
Los campesinos o vasallos vivían junto a sus familias en las tierras de los señores feudales, las cuales trabajaban tanto para el sustento propio como para enriquecer a los propietarios. El principal modo de riqueza era la tenencia de la tierra y su explotación.
14. La Sociedad y sus Diferencias
Debido a que el mayor poder y riqueza se centraba en la tenencia de la tierra, la sociedad estaba fuertemente dividida en clases sociales, con los más poderosos arriba (reyes y nobles) y con los más pobres al final de la escala (vasallos y campesinos).
La División Social Era del Siguiente Modo:
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La Iglesia
Al principio de la escala por ser quienes regían el poder de Dios en la tierra y quienes controlaban las costumbres y el pensamiento del resto. Solo los reyes se atrevían a cuestionar su poder.
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El Rey
Un señor feudal con inmenso poder que controlaba todo lo que ocurría en el reino y a quien todos debían tributo y respeto.
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La Nobleza
Constituida por los señores feudales. Eran los dueños de la tierra y tenían sus propios ejércitos.
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Los Vasallos y los Campesinos
Eran quienes trabajaban la tierra. Eran hombres y mujeres libres, pero que servían a un señor feudal a quien debía obedecer.
Algunos podían tener la tierra en alquiler, solo que debían pagar impuesto por lo cosechado en ellas. Eran los más desfavorecidos del sistema.
15. Demografía
Las mejoras en la economía de los pueblos permitió el crecimiento demográfico, el cual entre los siglos XI y XII pasó de 40 millones a 75 millones de personas.
Contradictoriamente, para finales de la Edad Media, el mismo sistema que ayudó a crecer la población también ayudó a reducirla, al no existir un control serio de la salubridad pública, sucedieron una serie de epidemias y enfermedades que diezmaron a la población.
16. Inicios del Comercio
Si bien el comercio había existido desde mucho tiempo atrás, viene siendo la Edad Media donde comienza a gestarse como un sistema organizado de adquisición de bienes. Se fue pasando del trueque al intercambio comercial.
A interior de los países, el comercio fue ganando terreno con la aparición de los primeros comerciantes, hombres que trasladaban, de un pueblo a otro, diferentes productos como lana, miel, cerveza, sal y cereales.
Más adelante fueron creciendo y ofreciendo productos de mayor costo y lujo como el papel, el perfume, entre otros.
Llegó un momento en que los comerciantes ya no pudieron trasladarse por la carga tan grande que llevaban y se asentaron en el centro de los pueblos.
Este asentamiento de los comerciantes produjo los primeros mercados y los primeros mercaderes.
17. Los Molinos de Viento
Una de las obras arquitectónicas que marcó este período de la historia fue la creación de los molinos de viento, con los cuales los campesinos podían moler el trigo y obtener así la harina para el pan y otros productos.
Esto dio un gran impulso al trabajo al ofrecer otras opciones.
18. La Arquitectura
Otra de las características más resaltantes de la Edad Media fue su arquitectura, la mayoría centrada en la construcción de castillos para los reyes y príncipes de la nobleza, que permitía a su vez la separación urbanística de los pueblos.
De igual forma, las grandes iglesias con sus estilos góticos y arabescos se dieron cita y proliferaron durante esta etapa. Y es que la construcción de las iglesias era el modo de asentamiento de la fe en las poblaciones.
De los estilos arquitectónicos que más destacan se encuentran el románico y el gótico. El primero se desarrolló entre los siglos XI y XIII con una estructura abovedada, arcos y portadas esculpidas, sucedieron junto al auge de los monasterios.
El gótico, por su parte, se presentó en las construcciones más urbanas, con las grandes catedrales de elevados muros y enormes naves que buscaban representar la grandeza del Creador.
19. Disolución del Sistema Feudal
Entrado el siglo XIII, el sistema feudal comenzó a decaer, en parte porque el subarrendamiento de los feudos hizo casi imposible que los dueños recibieran sus ingresos debidos.
Pero mayoritariamente se debió a la necesidad de la nobleza de recibir mayor cantidad de ingresos por sus tierras, lo que les obligó a sobreexplotar a los trabajadores.
Estos prefirieron abandonar el trabajo de la tierra que servir a un sistema explotador y sin beneficios.
Como se ha podido apreciar, la Edad Media fue el período más largo de la historia de la humanidad, donde el avance y desarrollo de los pueblos y su cultura se realizó con mayor lentitud.
Esto en parte producto de las constantes guerras que no dejaban paso a la renovación.
Ya a finales del siglo XV, con la aparición de la imprenta, la separación de la Iglesia en dos con la Reforma luterana a mediados del siglo XVI, el surgimiento del comercio exterior y el renacimiento, se verá luego un avance cada vez más rápido del hombre en su desarrollo cultural y económico.
Como puedes ver, la Edad Media fue una etapa de nuestra historia humana que, a pesar de marcada duración y lentitud en el avance, permitió el paso a la Edad Moderna.
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