Desde que el hombre apareció sobre la Tierra hace unos 4 millones de años, ha vivido en constante evolución, desarrollando nuevas estrategias de supervivencia, inventando diferentes tipos de herramientas con los materiales que ha tenido al alcance de su mano.
Este recorrido a lo largo de los siglos —y su constante evolución cultural y tecnológica— es lo que estudia la arqueología, como una rama de la antropología (que es la ciencia que se encarga del estudio del hombre como un ser integral en función de sus costumbres culturales y de sus características físicas).
La arqueología divide la evolución del hombre en dos períodos: la prehistoria y la historia. La prehistoria es la fase que comprende la aparición de los primeros seres humanos y su desarrollo durante todos los siglos que transcurren hasta que logra articularse como un ser enteramente social.
Prehistoria e Historia
La prehistoria comprende la historia del ser humano primitivo, su desarrollo y actividad.
Todo lo que se ha registrado sobre esta fase de la vida de la humanidad se ha obtenido de los fósiles recabados alrededor del mundo y de los yacimientos arqueológicos.
Gracias al descubrimiento de estos depósitos de evidencias se han podido obtener tanto huesos humanos que han permitido el estudio de su estructura, como instrumentos elaborados por los hombres.
La historia, por su parte, estudia al ser humano desde la invención de la escritura hasta la actualidad.
Con la aparición de los primeros pictogramas y los signos alfabéticos, el ser humano inició una nueva etapa en su vida, en la que pudo dar a conocer sus ideas e ir masificando la información, lo cual condujo hasta el desarrollo de mejores y más avanzadas tecnologías como las que hoy disfrutamos.
Para entender un poco más el proceso de desarrollo del hombre prehistórico debemos prestar atención a los períodos que lo conforman: Edad de Piedra y Edad de los Metales.
La Edad de Piedra
Comprende el período más largo de la historia humana y el de mayor lentitud en nuestro proceso evolutivo.
El hombre aparece sobre la Tierra y a medida que evoluciona biológicamente va también desarrollando conocimientos y estrategias de supervivencia. En este proceso descubre que las rocas pueden ser de gran utilidad y comienza a ingeniar formas de uso para ellas.
Esta etapa de la prehistoria se encuentra subdivida en los períodos Paleolítico, Mesolítico y Neolítico.
El Período Paleolítico
Se ubica entre 2 500 000 a 15 000 años a.C. Durante este tiempo el hombre utilizó la piedra de manera muy básica y rudimentaria. La tallaba para construir armas que le permitía protegerse y cazar.
Este es el período más extenso de la historia humana y comprende casi el 95 % de la misma. Durante este espacio temporal se dio la mayor evolución física, en cuanto a biología e inteligencia del hombre.
Los primeros homínidos en existir fueron los Homo Hábilis, por sus habilidades para la creación de herramientas; durante este período el hombre evolucionó y pasó a ser Homo Erectus, quien desarrolló el uso del fuego como herramienta.
Les siguió el Homo Ergaster que existió hace unos 1,8 millones de años y hay indicios de que fue el primero en migrar cuando abandonó África. Luego el Homo Antecessor y el Neandertal hasta llegar al Homo Sapiens Sapiens.
El paleolítico fue el espacio temporal más prolongado y donde el hombre alcanzó su mayor grado evolutivo. Logró avanzar de vivir en grandes grupos y aparearse solo por instinto a conformar pequeñas sociedades, vivir de la caza y la pesca y organizarse en grupos familiares.
El Período Mesolítico
Está ubicado entre el 10 000 y el 5 000 a.C. Durante este período ocurren importantes cambios climáticos que llevan al hombre a salir de las cuevas e iniciar la vida al aire libre.
El arma creada durante este tiempo fue el arco y la flecha. La punta de la flecha era de piedra, pero también se han encontrado de hueso.
Igualmente, se construyen las primeras chozas y el hombre comienza a vivir en asentamientos. Se inicia el proceso de diferenciación de razas y población de la Tierra.
El Período Neolítico
Durante este período el hombre alcanza su mayor dominio de la piedra, perfecciona sus armas e incluso inicia el proceso industrial. Trabaja también la cerámica, construye viviendas sólidas y maneja la textilería con el fin de proveerse abrigo.
Su vida social se vuelve más cercana, se establece en tribus y empieza el proceso de domesticación de algunos animales que utiliza para proveerse alimentos y seguridad.
Inicia también el conocimiento de lo religioso y construye grandes estatuas y estructuras monolíticas. Fue quizá el período de mayor desarrollo de toda la Edad de Piedra.
Edad del Metal
Una vez que el hombre logró dominar completamente la piedra, se vio en la necesidad de buscar materiales más resistentes para su trabajo. Así fue como empezó a utilizar el metal, iniciando por los más nobles y fáciles de moldear hasta los más fuertes y resistentes.
La Edad del Metal se divide también en tres períodos: Eneolítico, Bronce y Hierro.
El Período Eneolítico
Es también conocido como la Edad de Oro o de Los Metales Nobles.
Es un período de transición en el que el hombre fue probando la fundición de diversos materiales como el oro, la plata y el cobre. Fue mezclándolos y alternándolos con otros materiales para crear mejores herramientas.
El Período del Bronce
Se dio entre 2 000 y 1 000 años o más a.C. En este período inicia propiamente la Edad del Metal, con el descubrimiento por parte de los egipcios del bronce y sus formas de fundido.
Los egipcios realizaron muchísimos tipos de utensilios con el bronce y fueron quienes iniciaron la industria metalúrgica.
Gracias a ello, se dio comienzo también a la agricultura y la ganadería. El bronce permitió la elaboración de armas más potentes y resistentes, de armaduras, cascos y propició todo un equipamiento militar antes no pensado.
Esto generó, además, la aparición de los primeros reyes y de una clase más poderosa que se fue estableciendo con supremacía sobre otras, lo que condujo a las primeras formas de política y ordenamiento civil.
El Período del Hierro
Surge entre los años 1 000 y 500 a.C. Es la época en la que ya el hombre descubre nuevas aleaciones metálicas más fuertes como el hierro forjado y el acero, lo cual le permitirá desarrollar novedosas armas más resistentes y letales.
A su vez, se le facilita la fabricación de otros tipos de utensilios como muebles, soportes, puentes y así dar inicio al desarrollo aún más tecnológico de las sociedades.
Fin de la Prehistoria
La prehistoria encuentra su fin y da paso a la historia con la invención de la escritura.
Si bien el hombre primitivo de la Edad de Piedra ya había iniciado algunos trazos con su arte rupestre, donde dibujaban animales y su proceso de caza, no fue sino hasta el perfeccionamiento del alfabeto (por parte de egipcios y fenicios) que se abrió un nuevo horizonte en la historia de la humanidad.
Así, la evolución humana daría un nuevo salto con la comunicación, pues se facilitó el intercambio de información, se comenzó a llevar el registro de los avances y conocimientos que se tenían y que se siguieron alcanzando.
Sin duda, el ser humano ha construido el mundo que hoy conocemos a través de descubrimientos, aprendizaje y puesta en práctica de su ingenio para poder sobrevivir y prevalecer sobre otros seres vivos (humanos o no).
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